Durante la tarde y noche del día 4 de febrero, víspera de la festividad de Santa Águeda, multitud de coros ataviados con trajes típicos, recorren las calles y pueblos de Bizkaia, para entonar la tradicional canción en honor a la Santa Mártir. Es frecuente encontrar las calles de Bilbao con niños y mayores que acompañan este cántico con golpes en el suelo de los palos que portan. Santa Águeda es una de las primeras vírgenes mártires occidentales. Nació en Sicilia en el año 230 y fue martirizada en Catania el 5 de febrero del 251 por querer preservar su virginidad frente a la propuesta de matrimonio del gobernador Quinciano. Ante su negativa el gobernador la obliga a permanecer en una casa de mujeres de mala vida durante un mes, pero nada ni nadie logra hacerla quebrantar el juramento de virginidad y de pureza que le ha hecho a Dios Ante su obstinación el gobernador ordena azotarla cruelmente y destrozarle el pecho a machetazos. Al igual que otros muchos mártires, Santa Águeda fue nombrada patrona del País Vasco y en la actualidad, la conmemoración de su día se celebra en muchas parroquias, ermitas y colegios.
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